Miembros de una familia, minutos después de ser agredidos. |
Un testimonio gráfico facilitado por Elisheva Avital
Hace unos días, al cumplirse ochenta años de la Kristallnacht (la “Noche
de los Cristales Rotos”), el pogromo organizado en Alemania el 9 de
noviembre de 1938 por el régimen de Adolf Hitler, que daría paso al Holocausto,
la norteamericana Elisheva Avital puso en twitter una
serie de 25 fotografías sobre la agresión sufrida en aquella fecha por familias
judías de Fürth, localidad bávara situada a diez kilómetros de Núremberg.
Las
fotos -que componen una detallada secuencia de los hechos- las tenía guardadas el padre de Elisheva
Avital, quien estuvo destinado como soldado del ejército de los Estados Unidos
en Alemania, tras la derrota del nazismo en 1945. Los autores de las
instantáneas fueron dos fotógrafos del lugar: Karl Neubauer, cuyo estudio
estaba en la calle Grolandstr. de Núremberg, y Fritz Wolkenstörfer, con
domicilio entonces en la calle Flurstr. de Fürth.
Elisheva Avital |
En la noche del 9 al 10 de noviembre de 1938 (casi seis años después de que
Hitler fuera sido nombrado canciller, y dos años y medio después de la
celebración de las Olimpiadas de Berlín), un grupo de paramilitares de las SA,
acompañado de dos fotógrafos, irrumpe en el barrio judío de Fürth profiriendo
gritos. Empiezan a romper los escaparates de los comercios, entran en varias
viviendas (entre ellas, la del rabino), humillan y golpean con extrema
violencia a numerosas personas, algunas de las cuales se encontraban ya en pijama,
a punto de dormir, y exigen las llaves de la sinagoga. Acto seguido, se afanan
en destruir con mazas muebles y enseres, abren armarios, sacan libros para
amontonarlos y azotan por el suelo vajillas, objetos y todo lo que encuentran…
En el interior de la sinagoga, los atacantes cubren con alfombras parcialmente
las filas de bancos, rocían todo con bidones de gasolina y prenden fuego… Todo
ocurrió en apenas una o dos horas.
En el
siglo XVI, Fürth tenía la comunidad judía más grande de Alemania; en el XVII ya
funcionaba allí el primer hospital judío de Europa y a principios del XIX casi
un cuarto de su población profesaba la religión judía. La sinagoga destruida
esa noche databa de 1617.
H. del Río
Durante la noche del 9 al 10 de noviembre de 1938 (la denominada “Noche
de los Cristales Rotos”, Kristallnacht en alemán),
tropas de asalto de las S. A., junto con civiles, perpetraron en la Alemania
nazi (que incluía Austria), ataques, saqueos y linchamientos contra ciudadanos
judíos, mientras las autoridades alemanas observaban todo sin intervenir. Los jerarcas
nacionalsocialistas presentaron los hechos como una reacción espontánea de la
población tras el asesinato en París, dos días antes, de Ernst von Rath, secretario
de la embajada alemana, por un joven judío polaco.
Estos pogromos, ideados por Joseph
Goebbels, dejaron las calles cubiertas de vidrios rotos. Las propiedades
judías, incluidos hospitales y escuelas, fueron saqueadas y destruidas por los
atacantes. Al menos 91 ciudadanos judíos fueron asesinados y otros 30.000 serían
detenidos e internados en campos de concentración. Más de 1.000 sinagogas
fueron quemadas y más de 7.000 comercios resultaron destruidos o seriamente dañados.